jueves, 21 de noviembre de 2013

CONVERSACIONES CON MAMÁ

Sala: Teatro Bellas Artes Autor: Santiago Carlos Oves (versión de Jordi Galcerán)  Director: Juan Echanove Intérpretes: Juan Echanove y María Galiana  Duración: 1.30'
Información práctica (el enlace inactivo puede significar que la función ya no está en cartel)



Hay textos teatrales buenos y malos, como textos de cualquier otro género o, mismamente, tomates. Les voy a poner un par de ejemplos de textos excelentes, recientes y cercanos, que esto de los ejemplos esponja mucho las entradas rollo: Mi relación con la comida de Angélica Liddell y Prefiero que me quite el sueño Goya a que lo haga cualquier hijo de puta. Monólogos ambos. Sé que sus mentes perversas están deseando que ponga ejemplos infames, y les aseguro que están asaltando por docenas mis terminaciones neuronales, pero paso de hacerme enemigos gratuitos por proporcionarles un segundo de placer malsano. Otro día será.

Hay otra categoría de textos que, a falta de mejor término, llamaremos resultones. En esto no hay comparación posible con los tomates. Demos un rodeo. Cualquier cosa, desde Shakespeare hasta la guía telefónica gana en la representación -respecto a la lectura que hace uno mismo- si está bien interpretada. Recuerdo al difunto Juan Luis Galiardo en la tele leyendo el prospecto de un medicamento. Daba gusto oírle, incluso de cachondeo. Atentos al "excipientes aparte" en el minuto 2'20''. (Sin embargo, y por fortuna, una mala interpretación no siempre destroza completamente un buen texto. Vayan a un Romeo y Julieta de instituto, que por mucho que los jovenzuelos se empeñen en sus destrozos, cuando lleguen a lo del ruiseñor, la alondra y blabla no podrán dejar de admirar al autor).

El autor, Santiago
Carlos Oves.
El texto resultón es un caso especial de esta ley general. No sólo gana con una buena interpretación, sino que se transfigura. No es gran cosa, ni por aquí ni por allá. No deslumbra por su belleza formal, no sorprende por la novedad del concepto, no muestra un ingenio pirotécnico, no es un ejemplo  de construcción. Su virtud reside en que, bien representado, da oportunidad de lucimiento a un buen director y unos buenos actores. Misterio, sí, impenetrable como el de la Encarnación.  Un ejemplo reciente en Madrid: Master classLes diré, de paso, que el talento para calibrar cómo funcionará un texto en el escenario no es frecuente: gran cantidad de productores, directores e intérpretes no lo tienen. Es el motivo por el que, a veces, vemos cosas realmente inexplicables en escena.

La peli argentina
Pues lllegando ahora, por fin, a la cuestión que nos ocupa, Conversaciones con mamá es un texto resultón. Un melodrama resulton, para ser exactos, muy bien versionado por Galcerán. Me dicen que perfectamente aprovechado en la peli (que no he visto). No me parece que tan aprovechado en esta función. Echanove interpreta y dirige, y -no hay más remedio que repetir esto constantemente- eso es algo muy complicado. Tanto él como la Galiana, que está como para comérsela, son estupendos actores, pero la cosa está dirigida un poco en plan de dos más dos, cuatro. E incluso, en algún momento, de dos más dos, tres: véase el transporte lírico cuando Jaime cuenta el arrobamiento al ver a su hijo bailar. No sé yo si no había lugares mejores para tanta efusión.

Bueno, es una cosa amable, el público quiere a los intérpretes, no hay nada que chirríe... No está mal, qué más les voy a decir.
P.J.L. Domínguez
           

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